Prueba del Audi e-tron GT Quattro y RS e-tron GT

Esta es sin duda LA novedad de la marca con los anillos en la primera mitad de 2021. Audi da un paso más en su estrategia de electrificación y presenta la versión de producción del famoso e-tron GT Concept presentado hace casi tres años en el Salón del Automóvil de Los Ángeles. No contento con convertirse en la primera berlina 100% eléctrica de la gama, el e-tron GT también se convierte (en su versión RS una vez activado el overboost) en el Audi más potente de la gama, por delante del R8 V10 Performance, cuyo fabuloso sonido del V10 atmosférico aún persigue mis noches.

Un año después del lanzamiento del Porsche Taycan, Audi desvela su interpretación de la berlina superdeportiva eléctrica del grupo VW ofreciendo (¿inicialmente?) dos versiones distintas: el e-tron GT quattro y el RS e-tron GT, todos ellos disponibles en dos niveles de acabado, Base y Extended. Aunque los dos coches comparten la misma carrocería y la misma capacidad de la batería (93,4 kWh), el RS, que cuesta casi 40.000 euros más, viene con algunas características adicionales de serie, además de sus mayores prestaciones. Entre ellos se encuentran los discos de freno con tratamiento de tungsteno de 410 mm, el Torque Vectoring, las llantas de 20 pulgadas, el sistema de audio Bang & Olufsen, los asientos RS de cuero/alcántara y el paquete de estilo exterior negro (imprescindible para mí).

Al igual que el BMW i8 derivado del concept car Vision Efficient Dynamics o el Lexus LC500 derivado del concept car LF-LC, el Audi e-tron GT en sus versiones finales quattro y RS se acerca mucho a las líneas del concept car homónimo presentado en Los Ángeles hace tres años. El parecido con el prototipo es tan fuerte que era absolutamente necesario mencionarlo como preámbulo a esta prueba, incluso antes de describir el diseño general del coche, señala el concesionario de coches segunda mano en Madrid Crestanevada.

Una cosa es segura, el diseño de este coche es al menos tan comentado en la web como impresionante para el espectador que no está necesariamente preparado psicológicamente para ver aparecer un OVNI real ante sus ojos. Todas las miradas están puestas en este e-tron GT, sea quien sea, ya que incluso tuvimos la oportunidad de experimentarlo con el comisario, muy agradable por cierto. Aunque la necesidad de una parrilla abierta para refrigerar el motor está ausente, Audi ha querido marcar su identidad visual y por ello encontramos en el frontal una «falsa» parrilla hexagonal con los cuatro aros asentados orgullosamente en la parte superior. Sorprendentemente, no hay una triple branquia delantera (aunque sea falsa), aunque una de las dos versiones del e-tron GT tenga la denominación «quattro». En mi opinión, el recordatorio estilístico histórico habría sido más que legítimo en este coche. Los faros tienen un aspecto típico de Audi pero con una nueva firma LED y las rejillas de ventilación delante de las ruedas no son nada falsas, ya que ayudan a refrigerar los grandes discos de freno de 380 mm que vienen de serie en el e-tron GT quattro (410 mm en el RS, o 420 mm si se opta por los discos carbonocerámicos).

En la parte trasera, la amplia franja de luz es discutible pero recuerda al impresionante A7 Sportback, y la animación de luz nocturna al desbloquearlo hará las delicias de los amantes de la tecnología, además de impresionar a tus amigos. El amplio espacio entre la línea de cintura y las aletas traseras impresiona a cualquiera que tenga el placer de seguir a esta elegante (queda por discutir) berlina GT. La luneta trasera se funde con el maletero para dar cabida a un gran alerón retráctil, mientras que el enorme difusor no deja a la vista ningún tubo de escape, lo que resulta más inquietante de lo que parece.