Represión de Volkswagen en Bélgica: ¡devolución del 5% del dinero!

Volkswagen está siendo duramente tratada en Bélgica y tiene que empezar a pagar a los perjudicados.

El escándalo del dieselgate es ya tan antiguo como el Alfa Romeo Giulia. Después de todo, ambos debutaron en el IAA de 2015. La atractiva berlina deportiva de Alfa Romeo se está haciendo bastante vieja, el dieselgate un poco menos. A pesar de haber pasado ya bastante tiempo, siguen ocurriendo muchas cosas en torno a uno de los mayores escándalos de la industria automovilística.

Rupert Stadler, por ejemplo, «confesó» ante un tribunal que no sabía nada del dieselgate, pero que debería haberlo sabido. También en Bélgica sigue habiendo secuelas. Tras un largo proceso judicial, el juez finalmente dictó sentencia. Es bastante sorprendente lo que ‘dijo, porque, después de todo, ¡no se libran tan fácilmente como en los Países Bajos! ¿Motos de ocasión Madrid? Visita Crestanevada.

Demanda colectiva

La compra de prueba presentó una demanda colectiva. El grupo de víctimas formaba así un bloque único. Tanto Volkswagen como el importador belga d’Ieteren fueron demandados. Según Testaankoop, el grupo de víctimas afecta a unas 400.000 personas con un producto Volkswagen contaminado.

 

El tribunal dictaminó que existían «prácticas comerciales desleales». Concretamente, porque el cliente pensaba que estaba comprando un producto que cumplía todos los requisitos declarados y enumerados, cuando en realidad contenía software deliberadamente manipulado.

El tribunal dictaminó que VW debe indemnizar a los perjudicados tras este engaño. Volkswagen debe pagar el 5% del precio de compra. Por supuesto, es muy posible que las personas engañadas ya no posean el coche en cuestión en 2023. En ese caso, Volkswagen deberá pagar el 5% del importe del precio de compra menos el precio de reventa.

 

Los detalles picantes incluyen. La sentencia sólo se aplica a los Volkswagen afectados. No se aplica a las demás marcas del Grupo Volkswagen, como Audi, Seat y Skoda, aunque también utilicen motores diésel de VW. Además, el d’Ieteren (es decir, el importador) no es responsable, como tampoco lo es Porsche. Había muy pocas pruebas de que Porsche utilizara el software falso.